viernes, 23 de febrero de 2018

Bancos vintage

Cuando escuchamos la palabra vintage, los años 30 y 40 se nos vienen a la cabeza y estamos en lo cierto. Este estilo de decoración se guía por las tendencias clásicas. El banco vintage es un mueble imprescindible.
Banco vintage para su casa
Un banco vintage es aquel que transmite sensaciones de la época clásica de los años 20. Son bancos señoriales y majestuosos. Podemos diferenciar dos estilos al referirnos al banco vintage, los que siguen las tendencias clásicas y los de corte más moderno. Los primeros, son bancos de madera y normalmente los reposabrazos son de estilo rococó, con tintes barrocos. Se caracterizan también por las telas, normalmente floreadas o sobrias.
Si son bancos de exterior, pueden tener el respaldo muy señorial, con formas geométricas talladas en la madera. Un banco vintage de corte más moderno se identifica por sus materiales, ya que pueden incluir el acero entre ellos, pero de forma sutil. También suelen utilizar materiales sintéticos y con un cierto aire retro. La importancia del banco vintage también reside en cómo lo combinemos con otros muebles como sillas, mesas o un banco de otro estilo que tengamos.

Elementos imprescindibles para nuestro banco de estilo vintage

Si queremos crear un lugar ideal para nuestro banco vintage, hay que tener en cuenta el entorno. Hay varios elementos que son muy importantes:

El color de la pared: es imprescindible que sean colores suaves y elegantes como el blanco roto y los tonos pastel.

Alfombras: las alfombras pueden elegirse siguiendo patrones clásicos y no demasiado exagerados.
Detalles en oro: son muy importantes los marcos en esta tonalidad, pues son ideales para estilos clásicos.
Elección de los tejidos: los tejidos vintage destacan por sus colores pastel y porque en ellos predominan los estampados florales y con figuras geométricas. En cualquier tienda puede encontrar estos estampados para darle su sello personal al banco vintage.

El banco vintage puede inspirarse en las tendencias más clásicas o inspirarse en cortes más modernos sin perder un ápice de su elegancia. 

Vía: Westwing

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